¿Cómo Hago Para Aumentar la Motivación Al Entrenar?

Ser más activos, hacer deporte, dejar de fumar, beber menos alcohol, requiere que seamos constantes y conscientes de nosotros mismos, bastarían apenas dos semanas para olvidarnos del 90% de nuestros objetivos si no desarrollamos constancia. Para que esto no te suceda, hemos traído para ti los consejos más eficaces e importantes que te ayudarán a no perder de vista tu objetivo con el pasar del tiempo, y sobre todo para que no te rindas en momentos de debilidad.

 Fija Objetivos Más Concretos

La primera tarea a realizar es tener un objetivo concreto, por ejemplo, los del tipo: llevar una dieta más saludable, ponerse en forma, hacer más ejercicio, son más que todo objetivos vagos, pues no será fácil para ti entender cuándo los habrás alcanzado, ni mucho menos si estás siguiendo el camino correcto para lograrlo.

De allí que, sea importante definir tus objetivos numéricamente. Por ejemplo, establecer cuántos kilos deseas pesar, cuál debería ser la medida de tu cintura, o de tus brazos, en cuánto tiempo deberías lograr completar un entrenamiento o una carrera, cuántas repeticiones perfectas de algún ejercicio logras hacer o cuántas verduras por cada comida has incluido en tu dieta.

Como has visto se trata de fijar objetivos concretos, incluso una fecha dentro de la cual alcanzarlo.


Visualiza tu Objetivo

Ten en mente todos tus objetivos, imagínate cómo serás y cómo te sentirás cuando los hayas alcanzado. ¿te sentirás orgulloso? ¿sentirás alegría? ¿sentirás alivio? Deja fluir tu imaginación. Las emociones, sobre todo aquellas positivas, te motivan mucho más que los factores racionales.

No pierdas de vista tu objetivo, escríbelo en alguna parte para que te recuerdes en cada momento, colócalo en algún lugar donde lo puedas visualizar con facilidad a diario, como puede ser en el espejo del baño, o en el escritorio de tu computador o de tu oficina.

Establece un Objetivo Real

Debes tener metas elevadas, pero no tanto, debes ser realista con lo que pretendes lograr. Cuando estamos frente a las barreras motivacionales, a menudo deseamos hacer un cambio total e inmediato, y tendemos a exagerar. La fatiga y la frustración entran en juego y caemos en abandonar por completo nuestro objetivo.

Debemos iniciar desde nuestro nivel actual, no desde aquel al que deseamos llegar, y establecer una fecha realista dentro de la cual alcanzar nuestro propósito.

Alcanza tu Objetivo Etapa por Etapa

Establece con precisión los pequeños éxitos intermedios o mini metas que lograrás en el camino que te conducirá a tu objetivo final, y los pasos necesarios que deberás seguir. Escribe cada etapa, a modo tal de que puedas pasar fácilmente de una meta intermedia a la siguiente.

Cada vez que llegues a una nueva etapa sentirás una sensación de satisfacción y desearás seguir adelante hacia la próxima. Recuerda que, las etapas representan una confirmación que estás en el camino indicado, y durante esos momentos en los que sientes debilidad, te ayudará a no pensar que la meta final sea algo difícil de lograr.

Entrena con un Amigo

Persigue tus objetivos con una persona que tenga metas o intereses similares a los tuyos, puede ser: un amigo, un pariente, un colega. Es mucho menos probable que saltes una sesión de entrenamiento si tienes acordado entrenar con alguien, así sea sólo para no dejarlo plantado.

Además, tu alimentación mejorará si tienes a alguien al lado que observe lo que comes. Y naturalmente, también tú ayudarás a tu compañero de entrenamiento de la misma manera.

De hecho, los grupos de entrenamiento son muy útiles para evitar postergar continuamente las sesiones de entreno de un día a otro. Entrenándote con otros atletas lograrás tener la inspiración necesaria para siempre dar lo mejor de ti, y podrás comparar tus fortalezas y debilidades, para obtener consejos y compartir experiencias.

El ánimo que recibes del grupo de entrenamiento y la sensación de perseguir objetivos junto a otros atletas harán que tu motivación aumente.